Los superyates que llevan aerodeslizadores a bordo, son una gran ventaja. Y no sólo porque proporcionan diversión y mantienen contentos a sus clientes, sino porque también pueden llegar a la costa cuando el tiempo o la marea no acompañen o cuando haya aguas poco profundas, de difícil acceso para embarcaciones convencionales y botes de recreo, ya que no tienen hélice que pueda dañarse, y puesto que disponen de un colchón de aire que flota, no hay peligro de atravesar arrecifes de coral a las que otras embarcaciones no pueden llegar y además proporcionan las mejores experiencias de buceo.
